Un camino caminado
con una pesada carga:
el pan que hacen mis manos
embebido en esa espesa sangre.
Necesito llegar a casa,
seguir existiendo a sus espaldas.
Hoy el camino se llenó de gotas
que flotan.
El recuerdo de una imagen
proyectada en un utópico futuro,
se desvanece. Unos ojos que supieron
atrapar la luz de mi llama exangüe,
una cara sonriente: se disuelven
en las gotas que flotan en el aire.