Se
suele decir que hay música para músicos, literatura para escritores, cine para
quienes puedan apreciar los artificios que escapan al espectador poco
informado. Tal vez esto sea cierto, lo cual no le quita valor a ciertas
expresiones artísticas; sino tan solo reduce considerablemente el número de
receptores. Richie Kotzen trasciende esta categorización, dada la conocida
trayectoria que no es espíritu de esta sucinta entrada revisar. No obstante
esto, quien escribe no duda en absoluto que quienes hayan pasado por la
experiencia de intentar domar un instrumento y EXPRESAR algo a través de él,
van a valorar particularmente el recital que se comparte a continuación. Pocas
veces vi tal grado de simbiosis entre un músico y su instrumento. El recital
fue grabado el 2 de febrero de 2015 en Japón y editado el pasado 13 de
octubre.