domingo, 18 de noviembre de 2012

Escena de lo no cotidiano

Inventa, lleva hasta los confines

su inédita pantomima de chica-serpiente.

Ha transitado a puño la ambigüedad

del supremo arte de transmutar:

puede hasta con las deidades

la maestría de tutelar al rojo,

al oeste, al remoto río.



¡Ay de las incautas voluntades!

Se han rendido a sus pies,

si hasta se las ve cantar a veces

por las desiertas ciudades

su innumerable acopio de canciones.



Suele salvar del olvido

al desatino de esa impetuosa poesía

-facultad de acechar la siesta fugaz

del oponente, en busca de nuevos atuendos-:

puede hasta con los héroes

el peculiar oficio de doblegar las horas,

de liberar al otro viento…